Medicina general y de familia

                                          Cada vez es más habitual que los pacientes pidamos cita con el especialista que

                                     creemos que mejor va a entender nuestra dolencia, sin pasar por el médico general.                                                               Sin embargo, a menudo, es un error.

                         Los médicos generales no son solo médicos. Son especialistas capacitados para diagnosticar

                     y manejar diferentes patologías comunes y derivar al especialista indicado cuando corresponda.

                    De hecho, resuelven el 90 por ciento de las demandas de los pacientes.

        Su gran acierto como profesionales es que no ven solo aquello que parece afectar al paciente.

     Tienen la capacidad y la formación para ver al paciente como un sujeto integral, con diferentes

      afecciones. Por eso son capaces de entender mejor que otros especialistas qué le sucede.

                 Contar con el mismo médico general a lo largo de los años resulta muy ventajoso para el paciente, porque se   

           establece una relación de confianza entre ambos. Y eso hace más acertado el diagnóstico y tratamiento.

                                                                           ¿Qué enfermedades puedes tratar?

Depresión leve, diabetes miellitus,
Enfermedad cardíaca en etapa temprana,
Infecciones en general: cutánea, intestinal, urinaria,
Enfermedades cutáneas más comunes como la tiña, dermatitis, urticaria
Presión arterial alta o baja, incluido el seguimiento.
Anemias
Dolores de cabeza

Alergias
Prescripción de vacunas
Gastritis
Reflujo
 - Dolor de espalda (La lumbalgia aguda constituye la segunda causa de incapacidad laboral en nuestro país. Entre un 60 y un 80% de las personas sufren dolor lumbar en algún momento de su vida, pero su curso suele ser benigno. Con un tratamiento adecuado, es habitual que se prolongue menos de seis semanas).
Dolor en las articulaciones

 - Dolor de Garganta (El paciente suele acudir por dolor o molestias en la zona orofaríngea, amigdalar o ambas. A base de una serie de preguntas, el médico decide si es de origen vírico o bacteriano, aunque no siempre se consigue diferenciar).

 - Dolor Abdominal (De cada 10 pacientes que lo presentan, 9 no requieren ingreso ni cirugía. Es importante hacer un correcto diagnóstico diferencial para decidir si el proceso precisa o no de una valoración quirúrgica urgente).

 - Infección de orina (Sus síntomas representan entre el 5 y el 15% de las visitas al médico general. Es importante que el facultativo lo sepa diferenciar de una vulvovaginitis, para poner el tratamiento adecuado).

Además, se debe buscar al médico general en las siguientes situaciones:
 - Evaluación médica antes de cualquier cirugía.
 - Evaluación antes de comenzar una actividad física
 - Prevención de enfermedades y orientación nutricional.
 - Chequeo completo
 - Pruebas de rutina, que incluyen análisis de heces, orina y sangre.
 - Cuando no tiene muy claros los síntomas presentados.